Los tumultuosos cambios que han dado nueva forma al Partido Popular Democrático en la semana después del impactante anuncio de la Gobernadora Calderón de que se retiraría de la política después de su primer mandato, tienen todos los indicios de un golpe incruento dentro de una dinastía.
Muchos dentro del partido expresan su confianza en que la propulsión del hijo del anterior gobernador José Alfredo Hernández Mayoral a la cima del PPD ha rejuvenecido al partido, ha robado la ruidosa atención que el Partido Nuevo Progresista se atribuyó cuando hace meses se produjo la sorpresa del año el regreso del anterior Gobernador Pedro Rosselló a la política local.
No debe ser una perspectiva muy reconfortante para la Gobernadora que un abogado de 41 años sin pruebas anteriores sea más popular que ella. Pero al hacer literalmente la llamada a Hernández Mayoral para informarle de sus planes, Calderón admitía este hecho.
Sobre el papel, la nueva candidatura tiene buen aspecto para el partido especialmente en vista del creciente apoyo a Hernández Mayoral dentro del PPD. Es triste decirlo, pero dado el bagaje que llevan a cuestas los presuntos candidatos -- Calderón perseguida por acusaciones de dirigir una administración caótica y Rosselló aún ensombrecido por los escándalos de corrupción que involucraban a antiguos miembros de su administración ser un novato político solo puede resultar una ventaja natural.
Y Hernández Mayoral, cuya anterior experiencia política es su fallido reto en las primarias al Comisionado Residente Aníbal Acevedo Vilá, ha demostrado hasta ahora estar preparado para la gran escena. Se halla muy versado en las cuestiones, ha demostrado tener un carácter templado y propio de un estadista-y está ya tratando de forma convincente de establecer una aproximación entre los partidos.
Una de las razones por las que los partidarios de la estadidad y los de la independencia deberían preferir una administración de Hernández Mayoral a una administración Calderón es que abrazaría la cuestión del status. El candidato ya lo ha prometido así. Lo cual se ve como algo bueno para todos los que quieren resolver el dilema del status de Puerto Rico. Si hay algo en lo que los ideólogos locales están de acuerdo es en la creencia de que obtener la atención de Washington sobre el status local solo podría al final ayudar a dicha opción.
Pero el proceso que tuvo como resultado la propulsión de Hernández Mayoral a la candidatura gubernamental huele a que está siendo ungido rey. Incluso antes del anuncio de Calderón, todo el mundo sabía que ocupa el principal puesto en el partido, mientras que al Senador Roberto Prats se le dio el beneplácito del partido para presentarse a comisionado residente y a Acevedo Vila se le ofreció la oportunidad de presentarse a alcalde de San Juan una oferta que todavía tiene que aceptar.
Cualquiera que dentro del PPD tuviera otras ideas sobre la candidatura, fue rápidamente silenciado. El alcalde de Ponce Rafael "Churumba" Cordero Santiago llegó hasta a decir que dentro del PPD no había sitio para nadie que se opusiera a la candidatura de Hernández Mayoral.
Incluso antes de que la Gobernadora Calderón hubiera terminado de hablar en su discurso televisado, se estaban distribuyendo en San Juan insignias con "Hernández Mayoral para Gobernador" y se había puesto en funcionamiento un sitio web para el candidato.
Entretanto, el alcalde de Caguas William Miranda Marín fue rápidamente acallado tras decir que podría aventurarse a lograr La Fortaleza. Un día después del anuncio de Calderón, el Consejo General del PPD comprometió unánimemente su apoyo al segundo hijo mayor del antiguo Gobernador Rafael Hernández Colón, un Gobernador de tres mandatos que sigue siendo una poderosa personalidad dentro del PPD.
Estaba claro que el consejo de dirigentes del PPD ya había decidido lo que pasaría y para cuando el público fue informado de la decisión de Calderón, su sucesor ya había sido ungido.
Las anteriores batallas de Calderón con su anterior jefe Hernández Colón, y el papel que éste pueda haber desempeñado en desplazar a su hijo hasta el poder, también añadió intriga al drama que se desarrollaba dentro del PPD. Ella había desdeñado a Hernández Mayoral cuando pretendió el puesto de comisionado residente en el reto de unas primarias ante Acevedo Vilá en 1999. Mientras que Hernández Colón respaldó a su hijo, Calderón lucho duramente por su candidato Acevedo Vilá y finalmente prevaleció.
Pero hoy, parece ser que Acevedo Vilá ha sido desairado por la Gobernadora que había desempeñado un papel en entregar las riendas del partido a Hernández Mayoral.
El nuevo candidato a gobernador del PPD se aseguró en sus primeras entrevistas de salir de la sombra de su padre, diciendo claramente que no daría un paso para elevar el español como el único idioma oficial de la isla.
Uno de los primeros actos del Gobernador Pedro Rosselló en1993 fue hacer que el español y el inglés fueran los idiomas oficiales de Puerto Rico, revocando un estatuto anterior promulgado por Hernández Colón que definía al español como el único idioma oficial.
"No necesitamos confundir al pueblo haciéndoles pensar que tienen que ser oficialmente bilingües o oficialmente de habla española, porque las aspiraciones de nuestro pueblo son tener una población bien preparada que tenga el español como lengua vernácula pero que hable fluidamente el inglés," dijo Hernández Mayoral. "El idioma en Puerto Rico es una realidad tal como es. No requiere la aprobación ni l abolición de leyes para que la realidad quede de manifiesto."
Pero, a pesar de sus logros académicos y profesionales, Hernández Mayoral se encuentra en la carrera a gobernador porque es el hijo de un gobernador, uno de los políticos más formidables de la isla en el reciente pasado. Crecer en La Fortaleza ha formado gran parte de la refinada educación de Hernández Mayoral.
Eso vale. Después de todo, ser el hijo de un presidente ayudó sin duda al Presidente Bush a llegar donde está hoy en día.
Pero una multitud de competidores retaron a Bush en las primarias, y hoy al menos, hay primarias dentro del Partido Nuevo Progresista. No solo el desigual enfrentamiento Rosselló-Pesquera, si no los muchos contendientes por el puesto de comisionado residente en la papeleta electoral del PNP.
Hasta ahora, no parece que vayan a haber muchas batallas internas en el PPD. Es una lástima. Contribuiría a dar una apariencia de que los recién llegados a la política por lo menos habían superado una prueba cuando se acercasen las elecciones generales.
Los más importantes miembros del PPD alardean a grandes voces de la "unidad" del partido y el abrumador respaldo a su papeleta electoral. Pero se equivocan al no permitir, de hecho en no alentar, a otros contendientes potenciales que aspiren a los máximos puestos de liderazgo.
Los oponentes políticos ya han amontonado las críticas por la falta de primarias en el PPD como una tendencia antidemocrática en el colectivo.
No obstante, el verdadero riesgo es para los caciques del PPD, que erróneamente insisten en que un partido fuerte rechaza las primarias. La papeleta puede tener buen aspecto, pero tendría un aspecto todavía mejor si hubiera sobrevivido a un reto ante, digamos, Acevedo Vilá y Eduardo Bhatia, o Miranda Marín y un incalculable numero de otros notorios políticos, que si no por nacimiento sí por su trabajo por el partido, tienen al menos tanto derecho a presentarse para La Fortaleza o al puesto de DC, como el equipo de Hernández Mayoral-Prats creado por estrategas del PPD.
Deberían recordar que nadie le entregó las riendas del partido a la Gobernadora Calderón. Venció arrolladoramente a cinco tipos que se presentaban en unas primarias del PPD para alcalde de San Juan en1995 y de ahí paso a lograr un escaño un año después.
Cuando fue a por La Fortaleza, no solo venció el reto de Hernández Mayoral en las primarias si no la consiguiente falta de apoyo de su padre, que apareció en público con el oponente a gobernador Pesquera y otros pesos pesados del PNP en los días previos a las elecciones.
Calderón se ganó el derecho a dirigir el PPD. Su sucesor necesita hacer lo mismo.
John Marino, Editor de Ciudad de The San Juan Star, escribe la columna semanal Reporte de Puerto Rico para el Puerto Rico Herald. Su dirección de e-mail es: Marino@coqui.net |